El mejor sandwich mixto
El mejor sandwich mixto
La primera vez que viajé a Marruecos vi a una mujer sentada en el suelo de arena de desierto, frente a una hoguera hecha en un agujero en la tierra, apenas tenía llama. El sol quemaba. La mujer impasible, con su cabeza cubierta por un hermoso pañuelo blanco, su cuerpo orondo tapado por una gran túnica de colores dorados. Sus pies descalzos y sus manos hinchadas. Aquella mujer sonriente colocó una placa de metal sobre la hoguera y en pocos minutos comenzó a colocar unas bolas de harina, agua y sal. Las aplastaba con sus manos, dejando un grosor de un dedo, y en poco menos de 10 minutos, vuelta y vuelta, había elaborado unos panes realmente deliciosos.
Volví a esta forma de hacer pan en Turquía y también en India. Cada uno lo llama de una manera, le añade ingredientes distintos, los trabajan de diferentes formas pero en el fondo todos tienen los mismos ingredientes básicos: harina, agua, sal y levadura. Así que yo he cogido un poco de todo y he reinventado la receta y la verdad es que me queda muy rica. Desde entonces, es un tipo de pan que suelo preparar con cierta frecuencia en mi casa.
Soy super fan del sandwich mixto y una apasionada de ese pan ácimo o Shrak que hacen los beduinos, o los naan que hacen los indios. Por eso pensé ¿por qué no hacer un sandwich mixto de pan naan?
Bueno, pues aquí está la receta. En esta ocasión he acompañado a mi sandwich con un zumo de frutas y verduras que tenía en mi nevera (¡la super cocina del aprovechamiento!) y una riquísima mantequilla ‘saborizada’. En poco más de 20 minutos tenéis un desayuno Con esto os vais a sentir super Wake up!
Feliz despertar !!!!
PAN NAAM
Para: 6 a 8 personas
INGREDIENTES
170 gr. Harina
1 cucharadita de levadura fresca
150 ml de agua (con gas)
1 cucharadita de sal
1 yogur natural sin azúcar
Aceite de oliva virgen extra
50 gr de mantequilla fundida
ELABORACIÓN
Mezcla la harina, la sal y la levadura. Después añade el aceite, la leche, el yogur y el agua con gas poco a poco. Ve haciendo una bolita y déjala reposar con un trapo encima hasta que doble su tamaño (lo ideal son 10 o 20 minutos).
Calienta la plancha. Y mientras tanto haz unas bolitas con la masa y aplástalas. Añade una bolita de mantequilla a la plancha y da vuelta y vuelta a la masa.
Cuando lo veas tostado, sácalo de la sartén córtalo por la mitad y añádele un rico jamón y un buen queso en lonchas. Y ¡vuelta a la sartén!
Deja que se derrita el queso y… ¡a disfrutar!
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