Cinco libros para comerse el encierro
Huye del empacho de recetas que todos los ‘grandes’ chefs nos están regalando a través de las Redes Sociales y date el capricho de ‘echar las horas’ sentado en tu sofá favorito leyendo esas grandes joyas a las que deberíamos acudir una y otra vez. Es tiempo para la lectura. Aquí nuestras cinco recomendaciones para este fin de semana.
Ana Lorente
Cinco libros para comerse el encierro
Cocinar es un ejercicio magnífico para disfrutar de este aislamiento, y seguro que tienes un montón de recetarios y tutoriales, casi tan buenos como los nuestros para hacer desde croquetas de sobras (las que abundan en él congelador) hasta esferificaciones mágicas con esos polvitos que guardas hace tanto tiempo.
Pero además de platos, hay libros que no engordan y hacen la boca agua.
La selección de los cinco
1. Comer es una historia
De Oscar Caballero y editado por Planeta Gastro
El autor vive en Francia y es corresponsal de Club de Gourmets desde siempre. Un excepcional crítico gastronómico con una cultura renacentista que ha reunido en estas páginas un texto ameno para analizar ese acto tan cotidiano que es comer. Así se adentra en el fuego y en la mesa desde la prehistoria hasta la actual fusión global, desde la hoguera hasta el restaurante postmoderno, en cada rincón de la geografía y con un relleno trufado de sabrosas anécdotas.
2. Un cadáver entre plato y plato
De Tom Hillenbrand. Editorado por Grijalbo
¿Hasta dónde puede llegar un chef por la felicidad de sus comensales.? O es por ganar la difícil competencia profesional? O simplemente por el eterno movil que es el dinero?
El autor es un periodista alemán que conoce bien los entresijos de la economía mundial, de hecho ha sido uno de los cerebros del Fináncial Times o del Wall Streisand Journal, y eso se filtra en una trama endiablada tras su inocente imagen, entre deliciosos platos, excelentes vinos y sobremesas inteligentes que son el contrapunto de un thriller al modo tan clásico y bien elaborado como las mejores recetas.
Un libro para dejarse enredar hasta más allá del postre. Sin duda, éste es para guardar y releer
3. Confesiones de un chef
De Anthony Bourdain. Editorado por RBA
Con una vida y muerte novelesca, el gran chef y comentarista mediático en Estados Unidos, habla con descaro, con desverguenza, en esta especie de memorias, de las interioridades de la cocina y sus habitantes, que describe como “la pequeña e incestuosa comunidad”. Es fascinante porque todos nos relamemos con los chismes, sobre todo si están bien contados.
Un libro para «devorar con glotonería antes de vomitar»
4. Contra los Gourmets (y todas sus novelas de la serie Carvalho)
De Manuel Vázquez Montalbán
No solo fue un novelista politico-gastronómico que es lo que le hizo más popular, más conocido, sino un poeta, periodista profundo y una mente y un corazón concienciado en tiempos muy difíciles. Con ese bagaje, con ese apetito, trasmite a los lectores un mundo real, muy concreto y a la vez imaginario, es decir, tal como es la cocina. Pero, como decía él mismo “ una reflexión sobre la cocina solo puede hacerse desde el desenfado”. Y así lo hace, en novelas rebozadas por la actualidad del momento o en más sesudos y digestivos análisis como este.
Hay donde elegir: para revivir un tiempo histórico o para entretener un tiempo de encierro sin perderlo.
5. Charlie y la fábrica de chocolate
De Roald Dahl. Editado por Alfaguara
La historia es fantástica y con su moraleja y todo. Es un cuento, pero al estilo de un autor que divierte tanto como hace pensar con esos relatos que son como cebollas o como muñecas rusas, siempre con algo debajo de la primera capa, y de la segunda… Aún quienes conozcan la película que dirigió Tim Burton o la anterior de Mel Stuart encontrarán en el libro y su ilustraciones nuevos estímulos para la imaginación.
Para niños de todas las edades. Y para los padres es también muy recomendable otra narración del autor: La cata, de la que se han publicado magnificas ediciones ilustradas.
Ana Lorente. Es periodista, socióloga y escritora. Fundadora de A PUNTO y creadora de la revista gastronómica Archigula.