Siete razones por las que ‘casi’ no creer en las Estrellas Michelin
Siete razones por las que ‘casi’ no creer en las Estrellas Michelin
Somos conscientes que cualquier tipo de reconocimiento siempre es bueno para lucir el trabajo y el esfuerzo de un restaurante. Os recordamos que las Estrellas Michelin reconocen no solo el trabajo de un chef sino de todo un equipo, de su bodega y de la decoración del restaurante. Tanto que muchos restaurantes hacen las reformas pertinentes para ir consiguiendo sucesivamente las Estrellas. Algunos, logran su objetivo otros, no.
Parte del equipo A PUNTO solemos recorrernos los mejores restaurantes de España. Reservamos mesa en los Estrella o sin Estrella e intentamos disfrutar al máximo de la cocina, del espacio, de los vinos.
Sin embargo, por la experiencia que ya nos avala queremos daros las razones porque las que debemos de creer ‘solo un poquito’ en las Estrellas Michelin o en otro de los muchos reconocimientos que se hacen a los restaurantes de todo el mundo (léase la famosa lista de los 50 mejores restaurantes del mundo).
Bien pues aquí van nuestras razones:
- Porque hay grandes restaurantes en nuestro país, que han marcado un hito dentro de la historia de la gastronomía española que no tienen Estrella Michelin. Sí, es cierto que muchos de ellos se han negado a aceptarla pero NO LA TIENEN. Hablamos de templos como la casa de los Camba, Restaurante Arce, la de Abraham García, Viridiana, o la de César Martín, Lakasa… por nombrar a algunos.
- Porque hay muchos restaurantes que tienen tres Estrellas que, francamente, nos parece todo más ‘significante que significado’, es decir, los platos muy bonitos pero sin ninguna profundidad, sin aromas, sin emoción…
- Y este punto nos lleva a otra razón que es: los chefs que buscan la Estrella Michelin en ocasiones se olvidan que su profesión de chef es para hacer muy feliz a un comensal. Sin comensal no hay chef y sin chef ni comensal tampoco habría Estrella.
- Porque muchos de ellos solo por el hecho de tener Estrella suben los precios de una manera muy poco justificada
- Porque, aun sabiendo que las comparaciones son odiosas, pensamos que hay muchos restaurantes con tres Estrellas que no le llevan a la ‘altura del plato sopero’ a los que solo tienen una o ninguna. Recordando a los que tienen una, este año nos hemos quedado absolutamente enamorados de la cocina de Kiko Moya, L’Escala en Alicante (ole, eres muy grande), con la de Mario Sandoval en Coque (Humanes) -cada año más sutil y brillante- o con la de La Cabra (Madrid) francamente un gran descubrimiento; o nuestro último descubrimiento, Disfrutar en Barcelona (gracias equipo por hacernos soñar ¡qué lujo!)
- Porque en muchas ocasiones las Estrellas se entregan por herencia familiar, ya se sabe que eso de tener un cierto apellido ayuda mucho y eso hace que solo por el hecho de ‘ser vos quien sos’ le otorgamos la Estrella.
- Porque con el paso de los años, y con tantos reconocimientos que se están dando a cocineros y restaurantes, hemos idolatrado una profesión y forzado una manera de vivir para el chef, que la gran mayoría de las veces está más fuera de su cocina que dentro. Eso significa que puede que cuando vayas al restaurante el chef no esté.
Todo esto y mucho más son las razones por las que nos creemos solo un poquito de las Estrellas Michelín, aunque reconocemos que si no fuera por ellas ¡nos habríamos perdido tantos gratos y maravillosos momentos!
Ya que estamos en tiempos de ‘listas’ votamos por: Disfrutar de Castro, Xatruch y Casañas en Barcelona (un añito de vida, evidentemente sin Estrella pero se lo merece todo. Esta noche triunfa ¡seguro!); por la segunda para Coque; por las merecidísimas tres Estrellas de Eneko Atxa y de, para nosotros, la mejor: Carme Ruscalleda y su Sant Pau; por la espléndida cocina de Toño en Atrio (Cáceres); por el mayor reconocimiento del ya mencionado Kiko Moya o por el aplauso de aquellos clásicos que tanto y tanto nos han enseñado de cultura culinaria, hablamos, entre otros muchos, de por ejemplo Horcher.
Lo bueno de todo esto es que aún nos quedan tantas Estrellas que disfrutar.
Feliz noche estrellada, abriros un cava.