Receta de bizcocho de yogur con chocolate
INGREDIENTES PARA PREPARAR BIZCOCHO DE YOGUR CON CHOCOLATE
150 g de chocolate negro
200 g de azúcar
3 huevos
125 g de yogur natural
100 g de aceite
220 g de harina
12 g de levadura
Una cucharada de azúcar
Seguro que más de una vez has querido llevar un bizcocho casero a una fiesta o cumpleaños y no te ha salido del todo perfecto. No te preocupes, nosotros te enseñaremos a preparar un riquísimo y jugoso bizcocho de yogur con chocolate que hará las delicias de todos tus invitados.
Para ello, nos hemos basado en una receta del libro Pasteles, pastas, galletas…, que encontraremos en nuestra Librería.
El nombre de este plato proviene del latín «bis coctus», que significa «cocido dos veces». Se piensa que ya en el siglo X a.C., en la época de Ramsés III, en Tebas, ya se preparaba de esta forma para conservar los alimentos en trayectos largos, para soldados o navegantes.
Se trata de un alimento que podemos encontrar en todas las culturas y lugares, con una peculiaridad que lo hace típico de cada región. En España, por ejemplo, encontramos mantecados, sobaos, rellenos como el de Bergara, el brazo de gitano, etc.
El que vamos a preparar aquí es el bizcocho de yogur con chocolate, un clásico para cualquier celebración.
ELABORACIÓN DE BIZCOCHO DE YOGUR CON CHOCOLATE
Para empezar, es aconsejable conocer cómo funciona tu horno. Deberemos precalentarlo a 170 ºC, con calor arriba y abajo, durante unos 10 minutos aproximadamente, pero con cuidado de no pasarnos porque se nos puede tostar la parte de fuera del bizcocho estando el interior todavía crudo. Además, te aconsejamos tener preparados todos los ingredientes antes de ponernos a cocinar para que no se nos caliente demasiado el horno.
Por otra parte, en un cuenco, echa los huevos y el azúcar, y bátelos durante 5 minutos.
Podemos batir los huevos enteros, o separar la yema de la clara. Un buen batido es decisivo para que la masa de nuestro bizcocho no necesite levadura.
La forma correcta de batir es con varillas (o batidora eléctrica), hasta que se vuelva espesa y blaquee. Cuando levantemos la varilla, la masa al caer tiene que dejar una marca en relieve sobre el resto de la masa antes de hundirse. Como decimos, se puede hacer únicamente con las yemas, incorporando las claras más tarde, a punto de nieve.
¿Esto qué significa? Se trata de una técnica que consiste en batir las claras del huevo a una velocidad suave, con una pizca de sal, hasta que comience a aparecer una espuma. En ese momento, subimos de velocidad hasta que consigamos lo que se conoce como «puntas blandas». Es una espuma pero que aún no ha cogido la textura suficiente. Continuamos batiendo hasta que lleguemos a la fase de «puntas rígidas», en la que la espuma ya habrá cogido mucha densidad, pero al volcar caerá al suelo. Lo que tenemos que conseguir es una espuma densa, que al volcar no caiga. A eso se le conoce como «punto de nieve». Ya habremos conseguido un batido perfecto.
A continuación, añade el yogur y vuelve a batir durante unos segundos, hasta que quede perfectamente fusionado con el huevo y el azúcar en una misma crema.
Ahora es el momento de echar la harina, que hemos tamizado previamente. Para ello, echaremos la harina en un colador o tamiz y daremos pequeños toquecitos. La harina irá cayendo poco a poco, separándola así en pequeñas partículas. Es una forma sencilla de conseguir que nuestros postres queden más esponjosos, permitiendo la entrada de aire entre las mezclas, evitando al mismo tiempo que se formen grumos.
Como decimos, echamos la harina tamizada, junto con la levadura y batiremos hasta que se forme una masa homogénea y sin grumos.
Nos faltaría introducir el ingrediente estrella: el chocolate. En una sartén o cazo aparte, deberemos calentar y derretir el chocolate que hemos elegido, ya sea negro o chocolate a la taza. Una vez esté listo, lo añadimos a la masa de bizcocho y mezclamos muy bien.
Engrasamos el molde que hayamos escogido. Recomendamos uno rectangular, con unas proporciones de 27 por 11 cm y 7 cm de alto. Vertemos la masa en el molde de forma que quede la misma cantidad en todos los lados e introducimos en el horno durante unos 30-40 minutos.
TRUCOS PARA EL MEJOR BIZCOCHO DE YOGUR CON CHOCOLATE
Existen algunas recomendaciones que es muy importante que tengamos en cuenta a la hora de preparar postres al horno.
Por ejemplo, una de ellas es que nunca abras el horno antes de que hayan pasado 3/4 partes de su tiempo de cocción. Después de pasado este tiempo mínimo, podemos introducir un palito o cuchillo, y si sale limpio es que el bizcocho está listo. Sin embargo, si vemos que está crudo pero la superficie se está tostando demasiado, podemos poner encima un trozo de papel de aluminio hasta que se cocine el interior.
Otra sería que el tiempo de precalentamiento del horno no sea mucho mayor que el tiempo indicado en los pasos de elaboración, para evitar de esta manera que se nos pueda quemar.
La temperatura asimismo debe ser la misma que cuando vayamos a hornear.
Otra recomendación es colocar el molde a media altura, sobre una rejilla, para que todas las partes se cocinen por igual.
Por último, también es importante que escojamos el molde adecuado para nuestro bizcocho. Si tiene demasiada masa, ésta tardará en hacerse más tiempo y puede quedar cruda y podrá desbordarse. Si elegimos un molde más grande, lo que nos pasará es que el bizcocho saldrá finito y sin esponjosidad.
Otro truco que podemos utilizar para que el bizcocho quede más esponjoso, es dejando reposar la masa una media hora antes de hornear, consiguiendo que la masa suba más de volumen de este modo. También puedes dar unos golpecitos al molde antes de meterlo en el horno, para que el aire salga de la masa.
Puedes utilizar levadura química (preparada en polvos para hornear), pero si no tienes, existen otras opciones para que te quede un bizcocho esponjoso. La puedes sustituir por bicarbonato sódico, añadiendo una cucharada por cada 500 gramos que utilicemos de harina, aunque no es necesario si batimos los huevos correctamente.Si sigues estos consejos no tendrás ningún problema.
SIRVE Y DEGUSTA
Por último, cuando lo tengamos preparado, lo colocaremos sobre una rejilla unos 15 minutos para que se enfríe, y cuando ya esté frío, desmoldaremos.
Para presentarlo, podemos espolvorear un poco de azúcar glass por encima. Aunque si nos apasiona el chocolate y nunca tenemos suficiente, podemos decorar con unas pepitas de chocolate antes de meterlo en el horno, e incluso decorarlo con frutos secos o una tira de masa pastelera, como nos aconseja Xavier Barriga en su libro Bollería, donde también encontraréis riquísimas recetas como merengues, minipizzas, etc.
CONSEJO
Un truco para que el bizcocho te aguante esponjoso durante más días es envolverlo en papel de aluminio.
APRENDE A PREPARAR EL BIZCOCHO DE YOGUR CON CHOCOLATE
Si te ha gustado esta receta y quieres poder cocinar más, puedes aprender con nosotros a hacer riquísimos postres de forma divertida y dinámica en nuestros cursos de REPOSTERÍA.
Si lo que quieres es practicar en casa puedes consultar nuestra sección de PASTELERÍA, donde encontrarás libros como los siguientes:
